Hemos estado observando desde las
gradas que nos acercan a la política los comportamientos estratégicos asumidos
y consumados por el joven político, el Arquitecto Kalil Michel.
Este destacado profesional que
cuenta con un profundo arraigo familiar es el responsable de haber desarrollado
en el centro de la ciudad de Santo Domingo de Guzmán, una serie de obras y
proyectos urbanísticos de los más relumbrantes, portentosos y ambiciosos de los
que exhibe esta urbe.
Su excelente formación profesional,
su sensibilidad y ambiciones de cooperación hacia el desarrollo evolutivo de la
nación dominicana, han sido su base de sustentación para adentrarse en el campo
de la política desde la cual ya hoy escolla como uno de sus faros fulgurosos y
radiantes.
Para muestra vasta observar como
los medios despliegan en sus primeras planas cada movimiento táctico que
realiza en la política, cada actividad pro-sociedad que ameniza, cada riesgo
que asume con entereza, vigor y valor.
Todos nos regocijamos al escucharlo
comunicar de manera valiente y decidida sus ideas, sus planteamientos sobre la
problemática urbanística de Santo Domingo y las maneras de cómo resolverlos,
así como la exhibición de sus dotes de conocedor del arte del buen decir, del
buen hacer, influenciado por sus virtudes de entronizado lector. Todos los
temas que aborda, lo hace con un dominio que impregna absoluta seguridad en el
interlocutor.
Ha dado muestra de ser desprendido
en el manejo de su quehacer político evidenciado en tres decisiones que ha
tomado cada una de las cuales ha llenado de expectación a toda la colectividad
nacional.
La primera la hizo cuando
ostentando el segundo puesto en mando en la antigua Secretaria de Estado de
Obras Públicas y Comunicaciones, hoy Ministerio de Obras Públicas, decidió
renunciar de esta importante posición, así como del Partido oficial que lo sustentaba
en el cargo, prefiriendo ir a refugiarse a la oposición sin mayores
contriciones que las que resultan del deber cumplido. Esta actitud de
desprenderse de las ventajas que otorga el poder no es vista comúnmente en
nuestro medio político, solo en personas consecuentes con alta valía moral se
asumen reacciones de esta naturaleza.
La segunda muestra de
desprendimiento la acusó cuando desistió de sus aspiraciones para convertirse
en alcalde del Distrito Nacional a pedido que le hiciera la alta dirección de
su partido, el Revolucionario Dominicano cuando había realizado con recursos
propios toda una campaña que lo llevaría indudablemente al solio de la casa del
gobierno provincial de mayor manejo presupuestal con que cuenta el país.
La otra lo es la decisión que acaba
de tomar en estos momentos, que es la tomarse un sabático para ir a respaldar
la candidatura presidencial de su prohijador político, su íntimo amigo, a quien
lo inspiró en su mocedad a inscribirse en un Comité de Base del P.L.D., para
adquirir la doctrina formativa que finalmente lo llevara a convertirse en un
líder de la juventud de ese Partido; su promotor y alentador, el Licenciado
Danilo Medina Sánchez.
Todo el que conoce la intimidad de
la relación de estos dos destacados políticos dominicanos, sabía de ante manos
que era muy difícil, casi indefectible que entre ambos líderes no se diera el
acercamiento producido dada las actuales coyunturas que han traído los giros en
que se ha tornado nuestro actual proceso electoral, máxime cuando su mayor
líder, el Ingeniero Miguel Vargas Maldonado fuera excluido de la carrera
presidencial del Partido Revolucionario Dominicano.
Los comportamientos que ha asumido
el Arquitecto Kalil Michel, los ha incursionado no para escollar sobre la base
del mérito inmerecido, no para disfrutar de mieles producida por otros;
obsérvese que en una y otra ocasión, ambas decisiones las ha tomado para ir a
estar en una condición inferior a la que ostenta en el momento que ejercita su
decisión.
La formación política, intelectual,
profesional y sobretodo la valía moral de este joven, que se ventila como una
gran promesa nacional, le han permitido ganarse el respecto y la admiración de
toda la colectividad que aspira de sus políticos mayores sacrificios y entereza
en su proceder.
Kalil Michel ha estado sembrando en
los terrenos difíciles de la política, apostando a convertirse en uno que haga
cambiar el estilo arcaico y retrogrado en que se ha manejado este aspecto de la
vida pública en nuestro país.
Alimentados de las diatribas que
convergen en los intereses de quienes se han aferrado a la mezquindad para
proferir todo tipo de ruindades, improperios y crueldades contra este joven y
próspero aspirante del reconocimiento político nacional, tras su respaldo a la
candidatura presidencial del Licenciado Danilo Medina, se exponen a que la
historia se encargue de resaltar lo innecesario del proceder descarado e
ignominioso de ellos que han vilipendiado innecesariamente a quien no ha obrado
sino según los designios de su propia conciencia a favor de las mejores causas
nacionales más que las particulares al dar el paso de respaldo a una
candidatura que a la vista de los más preclaros es la que conduciría a mejores
estadios de desarrollos a la nación dominicana.
Nosotros apostamos a que la
trascendencia del arquitecto Kalil Michel en el campo de la política lo llevará
a cosechar abundantes parabienes, lo catapultará a las más altas esferas del
firmamento político nacional, hasta convertirlo en lo que más anhelen sus
aspiraciones.
Salomón Ureña B E L T R E.
Abogado.
809 353 5353.
809
381 4353.